Si bien el mes de abril comenzó con eventos interesantes a nivel astronómico, solo fue el comienzo del platillo principal, ya que nos esperan por delante numerosos eventos. El mes inicio con conjunciones y el eclipse total de Luna que se dio en el amanecer del 4 de abril y pudo ser visto en América y al anochecer de Asia, pero esto no fue todo, a continuación te contamos lo que sigue:
El 10 de abril, Mercurio estará alineado al Sol y la Tierra, y el 11 de abril, la Luna estará a la par de Plutón, invisible a simple vista.
La Luna en cuarto menguante tocará a Capricornio el día 13, para luego alinearse con Neptuno en Acuario, el día 15, fecha en que se inicia la lluvia de meteoritos Pi Púpidas.
El 16 de abril se dará inicio a las estrellas fugaces Líridas, con ilustres bólidos como fuegos artificiales.
El 17 de abril, en cambio, la Luna estará en su perigéo, es decir más cerca de su órbita, a solo unos 361 mil kilómetros de la Tierra, por lo que el menguante restante se verá más grande.
El 18 de abril, la Luna Nueva ocultará a Urano que sigue en Piscis. Al día siguiente en esta rueda del cosmos, la Luna pasará cerca de Mercurio.
Un acercamiento de solo 3 grados de distancia entre Marte y la Luna (saliendo de Luna Nueva), se producirá el 19 de abril en la constelación de Aries, inmediatamente luego de la puesta del Sol. Marte estará visible a ras del horizonte y Venus un poco más alto.
Dos días después, cuando la Luna esté junto a Venus, será Mercurio quien se asome al lado de Marte, también en el horizonte. Mercurio tendrá su máximo brillo el 22 de abril y estará a solo 1 grado de diferencia de Marte el día 23. Sobre ambos planetas, se alzará siempre Venus al anochecer.
El 22 es también la fecha en que la Lluvia de meteoritos Líridas llega a su máximo. Este fenómeno corresponde a los restos del cometa Thatcher. En tanto las Pi Púpidas harán su pico el día 24. Estos meteoritos corresponden a su vez a los restos del cometa 26P/Grigg-Skjellerup
El cuarto creciente de la Luna tocará en la constelación de Géminis. Al día siguiente nuestro satélite tendrá una conjunción con Júpiter en la constelación de Cáncer.
El cosmos está en constante movimiento y los planetas se entrecruzan entre sí como saludándose unos a otros en tanto ejercen de alguna manera su influencia sobre la Tierra.
Por ejemplo, cuando ocurrió el eclipse solar total de marzo, las partículas de plasma que vienen a toda velocidad del Sol fueron bloqueadas por la Luna. Simultaneamente se registró en esa zona ensombrecida un disturbio importante a nivel de la ionosfera, la capa más externa de nuestra atmósfera, por donde pasan las ondas de radio.
Vía: Lagranepoca