En la cruzada global para reducir el uso de bolsas plásticas, que tardan unos 150 años en degradarse y millones de ellas terminan en los océanos, la industria anda buscando soluciones más amigables con el ambiente.
Solubag es una opción. Se trata de la primera bolsa que se disuelve al entrar en contacto con el agua. Desde el año pasado, una empresa chilena las fabrica con alcohol polivinílico, un polímero soluble y otros materiales naturales que también pueden adaptarse a productos como envases y cubiertos.
Los consumidores tienen dos opciones: bolsas de tela y de plástico. La primera se deshace si el agua está a una temperatura de 85 °C y la segunda a 10 °C. Cada una tiene un precio estimado entre 0,4 y 1 dólar (las de tela) y de 0,12 dólares (las de plástico). La idea es que cada persona, luego de reutilizarlas, las sumerja en agua con la temperatura indicada.

La idea surgió en 2014 por los chilenos Salvador Mate, Alejandro Castro, Cristian Olivares, Roberto Astete y Patricio Cabezas mientras ocupaban diferentes cargos que, de una u otra manera, estaban relacionados con la producción de plásticos. Astete y Castro estaban trabajando en un detergente con bolsa que al entrar en contacto con el agua se deshiciera, sin embargo, el material era costoso.
Luego de experimentar durante cuatro años en el laboratorio, trabajar en el desarrollo de la idea, conseguir las certificaciones y patentes necesarias, en noviembre del año pasado los chilenos comenzaron la distribución de las bolsas por el mundo. Actualmente tienen oficinas en Santiago de Chile (Chile), Guadalajara (México), California (Estados Unidos) y en Praga (República Checa).
La iniciativa surge, en parte, dado que Chile se convirtió en el primer país de Latinoamérica en prohibir en todo su territorio que las grandes tiendas y supermercados entreguen a sus clientes bolsas plásticas. La legislación establece una multa de 370 dólares por cada bolsa de plástico entregada para quienes incumplan la ley, que rige en todo el territorio nacional.En Colombia
Desde la semana pasada 5.000 bolsas de estas llegaron al país y se pueden encontrar en el centro comercial Mall Plaza de Cartagena. Según Cristina Serrano, gerente general, la iniciativa de traerlas surge de la necesidad de cuidar los océanos.
“Hay diferentes alternativas, con las bolsas cada persona puede reutilizarla y cuando ya no preste el servicio que buscan, disolverlas en agua, así cada uno es responsable de cuidar el medio ambiente”, puntualizó. Las bolsas pueden ser reclamadas luego de presentar el recibo con compras superiores a 50.000 pesos en el centro comercial.

Vía: eltiempo