Desde hace varios días, una potente ola de calor azota al sudoeste de Europa, alcanzando su pico en España donde se superaron los 45 grados de temperatura y como consecuencia, se desataron varios incendios forestales en diferentes regiones.
El panorama no es muy alentador, ya que los especialistas proyectan que la ola de calor en la Península Ibérica tendría una duración de una semana a diez días, es decir, al menos hasta el domingo o quizás hasta mediados de la semana que viene.
La temperatura máxima, récord absoluto de calor, se alcanzó meses atrás en España, fue de 47,4 grados, registrado en agosto de 2021 en Montoro, en Andalucía.
Sin embargo, se esperan registros por encima de los 40 grados, en los valles del Guadiana, el Tajo y el Guadalquivir, en el cuadrante suroeste del país, y en el centro, según la Aemet, con temperaturas mínims entre 24 y 26 grados.
Toda España, salvo las islas Canarias, está bajo alerta por las altas temperaturas. Andalucía (sur), Extremadura (suroeste), y hasta Galicia (noroeste), de clima tradicionalmente moderado, están en alerta roja.
El calor se afianza y los incendios forestales, también.
El sur de Europa se encuentra en una compleja situación por los incendios forestales. En Grecia, un helicóptero que intentaba apagar un incendio forestal en Samos se estrelló en el mar Egeo, según informaron los guardacostas griegos el miércoles.
En Portugal, un incendio en la noche del martes causó la muerte de una persona en la región norteña de Aveiro, según los servicios de emergencia.
En Francia, dos incendios alimentados por “la vegetación seca, especialmente la maleza”, según las autoridades, arrasaron 2.700 hectáreas de pinos en la región de Burdeos (suroeste).
No se descarta que esta segunda ola de calor que afecta a Francia, en un mes podría ser “equivalente” a la mortífera ola de calor de agosto de 2003 (con casi 19.500 muertos en Francia), señaló Matthieu Sorel, climatólogo de Météo-France, que duró dos semanas.