Chisporroteante lava al rojo vivo cayó y el humo se elevó desde el Monte Etna en la costa este de Sicilia, Italia en una vista impresionante a principios de esta semana.
El martes, un equipo de televisión viajó unos 2,7 km río arriba del volcán hasta su cráter sureste para capturar un primer plano de la lava caliente que fluye desde el volcán más alto y activo de Europa.
Las últimas erupciones en el cráter sureste han llevado al Etna a aumentar su altitud en 33 metros tras las últimas erupciones en su cráter sureste y ahora su nueva cumbre se sitúa a 3.357 metros sobre el nivel del mar.
Las capas de lava y material piroclástico expulsados en las frecuentes erupciones se han acumulado en el cono del cráter sureste, el más joven y activo, y han ido transformando su morfología en el último año.
Desde 1980, el cráter noreste estaba considerado el más alto del volcán siciliano, con 3.324 metros, que llegaron a alcanzar una cota máxima de 3.350 metros en 1981, antes de que sus bordes se fueran erosionando.
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Un río de lava y un dantesco espectáculo natural
El volcán Etna, ubicado en Sicilia, es el volcán más alto de Europa, pero no suele causar grandes estragos, por lo que sus vecinos lo consideran el ‘gigante bueno’.
Y aunque la última gran erupción del Etna se produjo en 1992, lo cierto es que en febrero del 2021 volvió a despertar y desde entonces ha entrado en erupción más de 50 veces al año.
Ahora ha llegado un vídeo mostrando como la lava sale de dos nuevos respiraderos que se abrieron en el volcán. La escena, filmada el martes 31 de mayo, se produjo después de que el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV), Observatorio Etneo, anunciara que de una inspección que realizó se habían abierto dos respiraderos efusivos en un costado del cráter sureste del volcán.
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El primero está a una altitud de unos 3250 m (10 662 pies), el segundo a unos 2800 m. Los frentes de lava más avanzados alcanzaron una altitud de unos 2100 m. La tasa efusiva en el momento de las observaciones era baja y el flujo se movió dentro del Valle del Bove en dirección a Monte Simone, dijo el INGV.
Además, también se conoce que la amplitud del temblor, tras un incremento encontrado en la mañana, es estacionaria pero en rango alto. Las fuentes de la señal están ubicadas en el área del cráter sureste a una altitud de aproximadamente 3000 m. La señal infrasónica se ve afectada por el ruido del viento. Por lo que se puede ver en las grabaciones, la actividad parece baja.
En cuanto a las deformaciones del terreno, no existen variaciones significativas en las estaciones de las redes GNSS y Tilt, según el INGV.