Las fuerzas de la naturaleza tienen su propio parque de recreo: Islandia. Por eso, en la isla helada del Ártico encontramos abundantes esculturas, caprichosas e imposibles. Una de ellas es Hvitserkur, que para unos es un gran rinoceronte petrificado y para otros un arco del triunfo derretido por el fuego. En todo caso, ua peculiar figura que estimula la imaginación de todos los que viajan por el salvaje norte de la isla.
En realidad se trata de un formación geológica de magma volcánico de mas de 15 metros de altura moldeada hace miles de años y perfilada por el viento, las mareas y las olas del Atlántico Norte.
Hvítserkur, «el rinoceronte de piedra» es una curiosa formación geológica formada por magma volcánico hace unos miles de años y moldeada azarosamente por el viento y el agua hasta conferirle la pareidólica forma que tiene hoy en día y en la que, desde algunos ángulos, se puede apreciar claramente la figura de un rinoceronte bebiendo del mar.
Ubicado al norte de Islandia, al borde de la península Vatnsnes, en la parte occidental de la bahía Húnaflói, y a unos 15 metros cerca de la playa, se erige esta formación rocosa de más de 15 metros.
La roca es resultado de la intrusión de roca ígnea, debido a la actividad volcánica, en una fisura de rocas más antiguas. Debido a la erosión de los materiales más finos, provocada por la formación de Húnaflói (o bahía de los fiordos), Hvítserkur quedó al descubierto sobre el nivel del mar.
Fotografía:Jérôme Berbigier, denijs wim, Andreas Jones, Amarate Tansawet