El terremoto es un fenómeno natural, fascinante, pero no totalmente impredecible.
Cuando entre dos bloques de roca se genera una fractura, y los bloques comienzan a moverse, uno en relación al otro, podemos hablar de fuente sísmica o foco del terremoto; el punto inicial de la fractura es llamado hipocentro y puede encontrarse a muchos kilómetros de profundidad. El punto sobre la superficie terrestre, exactamente sobre el hipocentro es llamado epicentro.
Durante el proceso de ruptura, la energía elástica acumulada en las rocas es liberada imprevistamente bajo la forma de calor producido por la fricción y bajo la forma de ondas sísmicas.
La amplitud, o magnitud, de un terremoto es una medida absoluta de la energía irradiada desde la fuente sísmica y se puede calcular de varios modos, determinando la amplitud del movimiento del suelo o la duración de la señal sísmica.
La distribución de los terremotos y los volcanes sobre la Tierra no es casual: ambos están principalmente localizados en correspondencia a los bordes de los grandes fragmentos en los cuales se divide la superficie terrestre, conocidos como placas.
Algunos fenómenos se localizan donde las placas tienden a separarse (dorsales oceánicas y rift), otros donde éstas se deslizan una al lado de la otra (fallas), otros donde las placas se acercan y entran en subducción (fosas). Los seísmos están generalmente vinculados a los movimientos de las placas. Cuando dos de ellas convergen, la más densa se hunde bajo la más ligera: es el fenómeno de subducción
Entre las dorsales oceánicas particularmente activas encontramos la dorsal Medio-Atlántica, que separa la placa americana de la euro-asiática y africana, y la dorsal Pacifica, que corre paralela a la costa occidental de Norte América. Entre los rift valleys, es muy amplio aquel africano que, partiendo del Mar Rojo, corta toda el África Oriental por casi 8700 Km. Las fallas transversales a las laceraciones de la corteza permiten el movimiento reciproco de las placas, que deslizándose en direcciones opuestas producen fricción y por lo tanto violentos terremotos: es celebre la falla de San Andrés en California, a lo largo de la cual la placa del Pacifico se desliza hacia el noroeste, mientras la placa norteamericana se mueve en la dirección opuesta, y la falla Anatolica en Turquía.
El cálculo de la magnitud Ritcher es uno de los mas difundidos, y es la escala utilizada para evaluar y comparar la intensidad de los terremotos. Esta escala mide la energía del terremoto en el hipocentro o foco y sigue una escala de intensidades que aumenta exponencialmente de un valor al siguiente.
Magnitud sísmica y consecuencias
Menos de 3.5 => Generalmente no se siente, pero es registrado
3.5 – 5.4 => A menudo se siente, pero sólo causa daños menores
5.5 – 6.0 => Ocasiona daños ligeros a edificios
6.1 – 6.9 => Puede ocasionar daños severos en áreas muy pobladas.
7.0 – 7.9 => Terremoto mayor. Causa graves daños
8 o mayor => Gran terremoto. Destrucción total a comunidades cercanas.
Vía: jesusgonzalezfonseca
2 Comments
Lorena
Hpla soy de sta fe yo me pregunto xq andan hablando tanto dl fin del mundo cuando no existe solo lo qe existe es la destrucción del hombre tomemos consiensia y empesemos a cuidar nuestro planeta xq si no lp cuidamos nosotros no lo cuida nadie amemonos un poco y pensemos en nuestro futuro qe son nuestros hijos
Danny
no sale nada oshhhhhhh