Las temperaturas extremas siguen castigando a gran parte del oeste de Europa, con evento de ola de calor que mantiene a la población en alerta. A todo esto, se le suman los incendios forestales en varias regiones.
El primer mes del verano europeo sigue estando en los ojos del mundo, por los eventos de calor extremos que están asociados a la presencia del fenomeno de la Niña, en conjunto con el calentamiento global, producto del cambio climatico.
Climatólogos de todo el mundo siguen de cerca esta serie de eventos que no solo están dejando temperaturas máximas elevadas anómalas para vastas regiones, si no que también están provocando incendios de gran magnitud en varios países europeos.
Los servicios meteorológicos franceses prevén que este lunes se alcanzarán récords históricos de calor en la fachada atlántica con temperaturas que pueden alcanzar o superar los 40 grados, una situación que se irá atenuando el martes en esas regiones, a las que llegará un frente de tormentas.
Météo France ha puesto en alerta roja por canícula 15 departamentos de esa fachada atlántica, donde el domingo ya se registraron algunos máximos de temperatura desde que existen registros, como en el puerto de Brest, en Bretaña, donde se superó el récord de 35,2 grados de 1949.
Eso volverá a ocurrir esta tarde, ya que se estima que allí se podría llegar a 39 grados y a 41 en Rennes, señala en su página web Météo France, que insiste en que «en Bretaña este nivel de calor es completamente excepcional».
El calor se va a extender también al norte y al este de Francia, con 39 grados previstos en París o 35 en Estrasburgo, aunque el más intenso seguirá dándose como durante el fin de semana en el suroeste, con hasta 41 grados en Burdeos o 42 en Mont de Marsan.
A partir del martes, las temperaturas bajarán de forma sensible en la fachada atlántica, con lo que los servicios meteorológicos anticipan el levantamiento de la alerta roja allí. No obstante, en el este las máximas se situarán entre los 37 y los 40 grados.
Al final de la jornada del martes, habrá tormentas en un eje que irá de los Pirineos centrales en el sur a la frontera belga en el norte.
El miércoles, el calor intenso quedará localizado en el sureste de Francia, con temperaturas nocturnas muy elevadas, algo que podría durar todavía varios días allí.
En este contexto de canícula, siguen avanzando este lunes los dos incendios que se declararon el martes pasado por la tarde al sur de Burdeos, que ya han quemado en conjunto 15.000 hectáreas.
Esos fuegos han conducido a la evacuación preventiva de 16.000 personas. El Ministerio del Interior ha decidido ante la situación reforzar allí el dispositivo de extinción, de forma que este lunes trabajan 1.700 bomberos apoyados desde el cielo por seis hidroaviones de tipo Canadair y tres bombarderos de agua de tipo Dash. EFE