El Gobierno de Taiwán movilizó hoy a miles de soldados y activó el Centro de Respuesta a Emergencias, ante la proximidad del tifón Nepartak, el primero de la temporada, mientras que se producen evacuaciones en zonas de peligro.
El primer ministro, Lin Chuan, pidió que se intensifique la cooperación entre los diferentes organismos «para minimizar el daño a las propiedades y las vidas», ante las previsibles inundaciones y desastres naturales que acompañan a los tifones a su paso por Taiwán.
El ministro de Defensa, Feng Shih-Kuan, anunció el inmediato envío de 3,000 soldados a unos cien lugares proclives a las inundaciones, para ayudar en las labores de prevención, mientras se puso en alerta a unos 34,817 soldados, 3,409 vehículos y 119 botes inflables.
La Oficina Central de Meteorología ha advertido de que el tifón, calificado de «supertifón» por el Centro Común de Alerta, una agencia militar de Estados Unidos, podría traer hasta 900 litros por metro cuadrado de lluvia a Taiwán.
Nepartak se dirige directamente hacia la isla y la Oficina Central de Meteorología predice que afectará con mayor fuerza a la isla, con sus vientos y lluvias, el jueves por la tarde y el viernes por la mañana.