La fotografía se tomo sobre el norte de Nevada. La tradicional estructura de tipo yunque se aprecia de manera formidable en esta toma.
Lo que da vida a una cumulonimbus y la razón por la que alcanza esos tamaños monstruosos, son las fuertes corrientes de aire ascendente que hay en su interior. Estas corrientes se producen gracias a toda el agua que está condensando, pues pasar del estado gaseoso (poco ordenado) al estado líquido (más ordenado) requiere liberación de calor. Los físicos llamamos a ese calor “calor latente”. Cada gotita aporta una cantidad de calor muy pequeña, sin embargo al sumar la contribución de todas las gotas, se obtiene suficiente calor como para crear corrientes que viajan entre los 40 y 120 km/h. Bien dicen que la unión hace la fuerza. (Por esa razón los aviones evitan entrar a toda costa en nubes cumulonimbus)
Fotografía: ehren Boehm