Paraguas insólitos

El ingenio humano no tiene lí­mites, y hasta algo tan simple como un paraguas ha sido objeto de múltiples mejoras que algunas veces resultan útiles, pero otras sencillamente están al borde de lo ridí­culo.

A continuación les presentamos una serie de paraguas insólitos y de curiosos diseños, que forman parte de una bizarra categorí­a que incluye también al paraguas que no se moja y al paraguas que pronostica el tiempo, publicados anteriormente.

El diseñador británico Alex Wooley creó un paraguas en forma de embudo, que en lugar de un mango tradicional posee una pistola de agua, alimentada por el agua de lluvia que desciende desde el exterior del paraguas. Wooley afirma que la diversión está totalmente asegurada, siempre y cuando continúe lloviendo.

¿Cómo nos mojamos más bajo la lluvia: corriendo o 

En el sitio ThinkGeek está en venta este paraguas con iluminación LED incorporada, para que sus portadores sean capaces de ver claramente en la oscuridad de una noche tormentosa. Por sólo 25 dólares y un par de baterí­as (no incluidas) ahora también es posible dominar la Fuerza de los Caballeros Jedi y sentirse Darth Vader por un rato.

Desde Japón llega Pileus, el paraguas ultra tecnológico, que posee un proyector que utiliza su superficie interior como pantalla, una cámara de fotos incorporada, sensores de movimiento, GPS y una brújula digital. Por supuesto, también tiene conexión a Internet. El usuario puede tomar una foto con el paraguas y subirla de inmediato a Flickr. También puede descargar imágenes automáticamente desde ese mismo sitio para poder disfrutar de fotografí­as de lugares agradables y soleados, y olvidarse por un rato de la lluvia.

El amor jamás deberí­a suspenderse por mal tiempo. Con el paraguas doble Cupid, los enamorados pueden disfrutar de un romántico paseo bajo el agua sin mojarse ni resfriarse. Ideal para compartir y quedar como un caballero ante una dama empapada. Y todo por un precio semejante al de dos paraguas individuales. Aunque nos imaginamos que abrirlo, cerrarlo y guardarlo debe resultar bastante complicado, lo importante es el buen momento que promete hacernos pasar.

Para terminar, los paraguas Senz de diseño aerodinámico, con ingenierí­a de túnel de viento, confirman que la época de los paraguas retorcidos pronto pasará a la historia. Con un aspecto muy particular que ofrece de forma automática su cara más favorable al viento, los paraguas Senz combinan originalidad con la máxima tecnologí­a para no mojarse, resistiendo ráfagas de hasta 100 kilómetros por hora. En definitiva, por unos 50 euros tenemos a nuestro alcance un paraguas digno de un piloto de Fórmula Uno.