Las intensas precipitaciones no dieron tregua a la constante actividad y los trabajos de limpieza , sin poder considerar aún la fecha en que pudieran concluir.
El martes 13 de agosto por la noche, una intensa tormenta se desató, causando una notable respuesta de los servicios de emergencia. Se reportó que cientos de intervenciones fueron necesarias, y las labores de limpieza se extendieron hasta bien entrada la noche, sin que se vislumbrara un final cercano.
Las fuertes tormentas provocaron inundaciones significativas en el distrito de Karlsruhe. Las autoridades indicaron que los equipos de emergencia trabajaron sin descanso hasta la noche del miércoles.
La acumulación de barro fue tan extensa que las tareas de limpieza parecían interminables. Debido a que el agua inundó los sótanos, se tomó la decisión de cortar el suministro eléctrico en los distritos de Helmsheim y Heidelsheim para prevenir mayores daños.
Para la tarde del miércoles (hora local en Alemania), se informó que aproximadamente el 80% de los hogares en Heidelsheim habían recuperado el suministro eléctrico. En otras áreas se establecieron puntos de emergencia para atender a los afectados.
Lodo contaminado
Las autoridades confirmaron que, los lodos que se han acumulado, se encuentran contaminados por gasóleo que se emplea para calefacción. Por ello, residentes y ayudantes, deben empujar el barro hacia la calle frente a las casas.
El alcalde de Bruchsal, expresó que aún estaban pendientes de atender alrededor de 200 reportes, y continuaban llegando.
Posteriormente, los empleados del patio de construcción recogen el lodo y lo llevan a un área especial de almacenamiento, especialmente habilitada. Ahí, una vez seco, se examinará antes de poder transportarlo a un lugar de confinamiento final.