Greenpeace ha interpuesto una demanda ante la Audiencia Nacional contra el Gobierno Vasco por su modificación de la Ley de Costas, lo que permitiría la construcción de un nuevo museo Guggenheim en la Reserva de la Biosfera de Urdaibai. La demanda se ha presentado también contra el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Democrático por la decisión de reducir de 100 a 20 metros la servidumbre de protección del dominio público marítimo-terrestre en Murueta (Vizcaya), uno de los sitios seleccionados para la construcción del proyecto. La organización considera esta modificación como una medida “ilegal” ya que contraviene la normativa establecida en la Ley de Costas y vulnera también la legislación europea.
Además, el proyecto se situaría en las marismas de Urdaibai, un área que forma parte de la Red Natura 2000 y está bajo una estricta protección medioambiental. La demanda, iniciada el 23 de mayo de 2024, cuestiona la Orden Ministerial que aprobó esta medida, argumentando que se trata de una “desviación de poder” por parte de las autoridades responsables. El proyecto de construcción del nuevo Guggenheim abarcaría más de 61.000 metros cuadrados, con dos sedes en Gernika y en los antiguos astilleros de Murueta, ambos emplazamientos conectados por una ruta que atravesaría la zona protegida, lo que generaría un alto impacto en un entorno muy vulnerable al paso de personas (se estima que el museo podría recibir hasta 140.000 visitantes en los meses de verano).
La Ley de Costas establece que se debe proteger y recuperar el dominio público marítimo-terrestre, pero Greenpeace denuncia que, en este caso, el Ministerio ha actuado en sentido contrario. Además, según las previsiones del IPCC, la zona en cuestión es vulnerable a inundaciones debido al aumento del nivel del mar por el cambio climático, lo que, según Greenpeace, hace inviable la construcción de cualquier proyecto en ese lugar.
Lorea Flores, portavoz de Greenpeace en Euskadi, ha exigido la paralización inmediata del proyecto, señalando que la comunidad local necesita una estrategia de desarrollo que respete el valioso entorno natural de Urdaibai. Flores ha afirmado que no se deben respaldar proyectos privados financiados con dinero público, sin la participación de la ciudadanía y que amenazan el bienestar de la población y el medio ambiente. Esta demanda es parte de una campaña más amplia, apoyada por otros colectivos como la Plataforma Guggenheim Urdaibai STOP, que busca detener este proyecto debido a los riesgos medioambientales que implica para una zona de alta importancia ecológica.