La cantidad de polen y la presencia de ácaros en la primavera tienen a muchos a puro estornudo. Hay consejos para mejorar la calidad de vida de quienes sufren las tan molestas alergias primaverales y aquí te los contamos.
En la Argentina, una de cada cinco personas es alérgica y su calidad de vida se ve muy afectada por esta condición esto se produce porque en la primavera es cuando ocurre la polinización de los árboles.
Si sos uno de ellos te dejamos estas sugerencias:
- Realizá actividad física o caminatas utilizando tapabocas o tapanariz.
- A la mañana temprano y a la tardecita hay mayor concentración de polen por eso evitá hacer actividad física en esos horarios.
- Vigilar la ventilación de tus ambientes ya que el polen es tan liviano que puede ingresar a las habitaciones y producirte alergia dentro de tu hogar.
- Si tu dormitorio está cerca de árboles, procura moverlo de lugar durante el período de polinización
- Los ácaros son los principales responsables del desencadenamiento de las alergias en las personas susceptibles. Los ácaros viven en las alfombras, colchones, almohadas, frazadas, bibliotecas, y en todos aquellos lugares donde pueda acumularse el polvo.
- La cama en un lugar ideal para el desarrollo y reproducción de los ácaros. Mientras dormimos, cada vez que nos movemos, los deshechos de los ácaros se remueven. Por eso, en las personas alérgicas, los síntomas pueden empeorar durante la noche.
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- Se recomienda que las superficies sean lisas y fáciles de limpiar, usar pocos adornos y evitar las bibliotecas en el dormitorio que acumulen polvo. Los peluches son enemigos de los alérgicos, es recomendable no tener en la habitación y guardarlos en el dormitorio.
- Las mantas o acolchados es ideal que sean de fibra o de algodón y se deben lavar cada seis meses, aproximadamente. La primera medida que se debe tomar es utilizar fundas antiácaros para el colchón y la ropa de cama.
- Utilizar ropa de cama que sea de algodón. El algodón es considerado la fibra más utilizada en el mundo por ser fresco, absorbente y cómodo. Es una tela que «respira» una fibra natural que no contiene productos químicos, lavable fácilmente con secado rápido y el aire circula entre las capas. Su desventaja es que se trata de una fibra que se encoge y se arruga con mucha facilidad.
En cambio, el poliéster es una fibra artificial, producida por el hombre, producto de la industria del petróleo. Es más económica, fuerte y resistente a la decoloración por el sol, y también resistente a las arrugas. Tiene como desventaja ser una fibra que no respira, y no absorbe la humedad de la piel de la persona.
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En ningún caso se recomienda el uso de naftalinas ni productos antipolillas, ya que estas sustancias desprenden productos químicos irritantes que empeorarían el proceso inflamatorio de la persona alérgica.
Fuente: https://www.infobae.com/