Estas fotografías del Parque Nacional Los Glaciares, en Argentina, muestran dos grandes lagos y parte del Campo de Hielo Patagónico Sur, la segunda mayor extensión de hielo del planeta fuera de las regiones polares.
Parecen enormes alfombras desparramadas sobre las montañas. Algunas se hunden en el lago, mostrando un alto frente de hielo que hace siglos cayó en forma de nieve. Pese a su apariencia compacta, el interior de los glaciares está repleto de ríos y grietas que crujen en un sinfín de pequeños desprendimientos.
Si se miran de cerca, es frecuente ver cómo se despega un témpano y cae al agua. El espectáculo es estruendoso, pero es normal que el frente de los glaciares pierda masa debido a las temperaturas, a las fricciones internas y a su movimiento. El problema es que no se recuperan, algo que pasa en la mayoría de los campos de hielo del planeta.
El parque nacional fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1981, y se encuentra entre los lagos Viedma (en la parte superior de la imagen) y Argentino (abajo), la mayor reserva de agua dulce del país. Este sistema de lagos recibe el agua del deshielo de los glaciares y de los ríos de la región, y su color tan característico es debido a una fina suspensión de partículas de roca molida por los glaciares que se conoce como ‘leche glacial’.
La antigüedad de los grandes campos de hielo glaciares
La mayoría de los 50 grandes glaciares del Campo de Hielo Patagónico Sur han retrocedido a lo largo de los últimos 50 años debido al aumento global de las temperaturas. En la esquina superior derecha de la imagen podemos ver el glaciar Viedma, que desemboca en el lago del mismo nombre. Un poco más al sur se encuentra el glaciar Upsala, que se ha retirado más de 3 kilómetros en los últimos 15 años.
En el centro de la parte inferior de la imagen se puede distinguir el glaciar Perito Moreno, el más famoso del parque por su proceso de ruptura, y uno de los pocos que ni avanza ni retrocede, sino que permanece en equilibrio pasando por ciclos periódicos de acumulación y ablación.
Perito Moreno se encuentra en un estrecho canal donde comienza el brazo sur del lago Argentino. Cuando el glaciar avanza llega hasta la orilla opuesta, formando un dique de hielo que separa las dos masas de agua.
Mientras el dique permanece en pie, el agua y el hielo mantienen una especie de duelo. Las aguas del deshielo fluyen hacia el brazo aislado del lago, y cuando su nivel aumenta demasiado, el dique colapsa y las libera con una fuerza devastadora. Este proceso ocurrió por primera vez en 1917 y arrasó un bosque centenario. Desde entonces, el ciclo se ha repetido más de veinte veces.
Vía:noticiasdelaciencia