Qué sucede en el proceso de una erupción volcánica

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Cómo se produce una erupción volcánica? El fenómeno natural que nos muestra la majestuosidad de nuestro planeta y a la vez es un poco aterrador. 

Nuestro planeta funciona como un engranaje bien aceitado, todo está conectado y le permite comportarse como una gran entidad. Quizá nuestra comprensión de las dimensiones no nos alcanza para imaginar por completo a la Tierra trabajando como una sola unidad, pero así es como se comporta. Los fenómenos naturales que en ella se suscitan están interconectados con otras funciones que no vemos a simple vista.

Las erupciones volcánicas no son simples lanzamientos de materia incandescente, sino que van más allá de eso, desde el proceso para que una erupción se presente, hasta los cambios que provoca en el planeta. Para entender mejor el proceso de erupción de un volcán, hay que mirarlo desde distintos ángulos, empezando por lo que yace debajo de la tierra.

Composición de la Tierra

Nuestro planeta está constituido por diversas capas, imagina una masa esférica con diferentes recubrimientos de materiales que la vuelven de tamaño gigante. Además, las capas presentan diferencias de temperatura, conforme más al centro más caliente y las más externas se vuelven más frías. Justamente así es como está formada la Tierra.

En el interior, existe una capa compuesta por rocas fundidas, cristales y gases, a temperaturas sumamente elevadas al que llamamos magma. Pero en las capas más exteriores y frías tenemos lo que denominamos las placas tectónicas. En ocasiones, en los bordes de estas placas se forman los volcanes, que son ductos de escape para la Tierra. En otras palabras, cuando existe una presión muy grande debido al aumento de temperatura en el magma en el interior del planeta, este tendrá una forma de escape a través de los volcanes y así es como se producen las erupciones.

Cómo se produce una erupción volcánica

Cuando se suscita un aumento de elevación de la temperatura en el magma, aumenta la presión en el interior de la Tierra y este sale disparado con sacudidas violentas hacia la superficie a través de los volcanes. La sacudida a causa de la expulsión puede llegar a ser tan violenta que incluso en ocasiones provoca sismos y además, causa daños en los alrededores.

En el transcurso de tiempo en el que el magma se aproxima a la superficie, pierde parte de los gases contenidos en su solución, ocasionando la generación de burbujas en su interior. De acuerdo con las condiciones y el comportamiento del magma, se pueden suscitar dos formas de erupciones volcánicas.

  • Erupción efusiva: Si los gases del magma se liberan sin alterar la presión, el magma puede salir a la superficie sin explotar.
  • Erupción explosiva: Si el magma acumula más presión, sin liberar los gases, entonces las burbujas crecerán en su interior y el magma se fragmentará violentamente, produciendo una explosión.

Cuando el magma sale por el cráter del volcán, deja de llamarse así y pasa a ser lava. Cuando toca la atmósfera, se enfría y se solidifica de distintas formas. Los nombres de los restos que deja una erupción volcánica depende de su tamaño, así tenemos desde las partículas más diminutas llamadas cenizas, hasta las más grandes llamadas bombas volcánicas.

Índice de explosividad volcánica

Ahora sabemos que existen diferentes magnitudes de erupciones volcánicas, no todas son iguales. Para conocer más sobre el tema, los expertos estipularon lo que se conoce como Índice de explosividad volcánica, que es más o menos una especie de escala Richter, pero para volcanes.

Va del 0 al 8 para medir la fuerza de las erupciones y al igual que la escala Richter, el aumento de los valores no es de forma lineal, sino exponencial. Así la diferencia entre cada intervalo representa un aumento de diez veces en magnitud.

Daños colaterales y efectos en la salud

Las consecuencias dejadas por una erupción volcánica son severas, la lava presenta altas temperaturas por lo que fundirá todo a su paso, flora y fauna. Es por esto que las poblaciones deben mantenerse alejadas de volcanes activos. Pero este no es el principal problema, la cuestión realmente preocupante son los flujos piroclásticos, que son violentas avalanchas de ceniza, roca y gases que brotan del volcán.

Los principales problemas en cuanto a salud, están estrechamente ligados a enfermedades respiratorias causadas por la aspiración de ceniza volcánica que es capaz de viajar grandes distancias. Es por esto que es importante seguir todas las medidas de seguridad cuando nos enfrentamos a una situación de esta índole.

Vía: ecoosfera

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