La desforestación en África se reduce en un 18% gracias a las alertas de un sistema de satélites operado por la Universidad de Maryland que funciona en todo el planeta
El laboratorio GLAD (Global Land Analysis and Discovery) de la Universidad de Maryland analiza imágenes de alta resolución tomadas por satélites Landsat para detectar una disminución de la cobertura forestal de cualquier zona del planeta.
Cuando un incendio forestal o una tala de árboles hace que desaparezca la cobertura en alguna zona del trópico, el sistema GLAD envía una alerta a través del correo electrónico. Esto ha permitido reducir en un 18% la deforestación en África, en relación con los niveles medios entre 2011 y 2016, según revela una investigación publicada en Nature Climate Change el pasado 4 de enero.
El sistema de alertas ha permitido proteger los bosques en regiones de Uganda, en los límites del Parque Nacional Kibale, o en caminos de acceso que conducen a la tala ilegal en bosques primarios de Perú, o priorizar el destino de los limitados recursos en el bosque tropical Leuser en Indonesia.
ASÍ DISMINUYÓ LA DEFORESTACIÓN UN 18% EN ÁFRICA
Fanny Moffette es la investigadora del Departamento de Economía Agrícola y Aplicada de la Universidad de Wisconsin-Madison. Buscaba comprobar si las alertas automatizadas del GLAD podrían ayudar a reducir la deforestación para mitigar el cambio climático. En el estudio su equipo analizó las suscripciones al sistema de alertas en 22 países tropicales de América del Sur, África y Asia entre 2011 y 2016.
África fue el único continente en el que las organizaciones locales actuaron siguiendo las alertas del GLAD. Es un dato muy positivo teniendo en cuenta que entre 2010 y 2020 África registró la mayor tasa anual de pérdida neta de bosque con 3,9 millones de hectáreas.
La reducción de la deforestación en un 18% en un periodo de dos años se consiguió gracias a los esfuerzos del GLAD por estudiar el continente, en comparación otras zonas donde ya había sistemas de monitoreo existentes, como en Indonesia o Perú. Tampoco pudieron aplicarlo a países con inestabilidad política, como Colombia o Venezuela.
CÓMO FUNCIONAN LAS ALERTAS
El sistema de imágenes por satélite tiene una resolución de aproximadamente 900 metros cuadrados (la superficie de la azotea de un edificio). Puede proporcionar alertas cada ocho días si el cielo está libre de nubes. Cada semana, a medida que los satélites transmiten las imágenes al laboratorio, se comparan con datos del pasado, se evalúa la pérdida de cobertura arbórea, y se añaden a Global Forest Watch.
El Global Forest Watch es un proyecto del GLAD en colaboración con el World Resources Institute. Se trata de una interfaz gratuita e interactiva desde la que cualquier persona puede acceder a los datos recopilados en cualquier parte del mundo.
Los usuarios del sistema pueden definir áreas personalizadas del lugar que quieren monitorizar. Se pueden recibir correos electrónicos semanales, disponibles en seis idiomas, que contienen las coordenadas geográficas de las alertas dentro de las áreas monitoreadas.
De cara al futuro, el equipo de Moffette trata de evaluar el efecto de las nuevas características de la plataforma, como los datos que pueden servir de base para la restauración de los bosques. Al mismo tiempo intentan apoyar los esfuerzos de las organizaciones que intervienen para detener la deforestación.
POR QUÉ ES IMPORTANTE PROTEGER LOS BOSQUES
Los árboles son necesarios para la supervivencia de nueve de cada diez especies del planeta. Además, capturan el dióxido de carbono presente en la atmósfera a causa del cambio climático.
Según el Foro de Naciones Unidas sobre los Bosques celebrado en septiembre de 2020, los árboles actuales del planeta podrían absorber hasta de 15 gigatoneladas de CO2 al año para 2050, suponiendo que se conserven.
Los bosques también son hábitat de infinitas especies; impiden la erosión del suelo, y generan el oxígeno que permite que nuestra atmósfera sea respirable.
Desde 1990 hasta hoy se han perdido 420 millones de hectáreas de bosque en todo el mundo a causa de la deforestación. No obstante, se ha observado una considerable disminución entre 2015 y 2020 (10 millones de hectáreas deforestadas) en comparación con 2010 y 2015 (12 millones de hectáreas deforestadas).
La deforestación provocada por incendios de bosques genera entre el 6 y el 17% de las emisiones mundiales de dióxido de carbono. Evitando la desforestación con sistemas como GLAD se podría reducir el riesgo de calentamiento global en una cantidad comparable.
Vía: QUO