Se necesitan entre 15 y 20 mm de precipitación para proteger lo sembrado en maíz y evitar que el trigo siga perdiendo rendimiento. La superficie en sequía ha aumentado en comparación con el año anterior, y la ausencia de agua se ha convertido en la principal preocupación para los productores agropecuarios.
La situación se ha vuelto más crítica en el centro y oeste de Entre Ríos, Santa Fe y Córdoba, donde las reservas de agua son preocupantes. La esperanza está puesta en la posibilidad de lluvias entre el domingo y el martes, ya que la tormenta reciente apenas dejó acumulados significativos en la región central. Según la Bolsa de Comercio de Rosario, las precipitaciones comenzaron en el sur de Buenos Aires y disminuyeron hacia el norte, alcanzando entre 5 y 18 mm en varias áreas.
La sequía en el centro de la provincia es seria y se agrava hacia el oeste. Al comparar las reservas de agua del suelo con las del año anterior, se observa que la sequía afecta ahora al 54 % del área, en comparación con el 42 % del año pasado.
Avance en la siembra de maíz
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires reportó que la siembra de maíz ha avanzado un 7,1 %, gracias a las lluvias en el centro y sur de Santa Fe, sudoeste de Entre Ríos y noreste de Buenos Aires. Sin embargo, el éxito de la campaña es incierto, ya que se espera sembrar 6,3 millones de hectáreas, dependiendo de las precipitaciones y factores económicos.
Los productores están optando por siembras tempranas debido al impacto de la chicharrita Dalbulus maidis. Hasta ahora, se han sembrado 500.000 hectáreas, comparado con las 240.000 del año anterior. En la zona núcleo, quedan por sembrar 810.000 hectáreas, donde se requieren 15 a 20 mm para asegurar una buena emergencia del maíz.
El trigo en apuros
La Bolsa porteña informó que la condición hídrica del trigo ha caído 5,4 puntos porcentuales, afectada por la falta de lluvias y el aumento de temperaturas, que han acelerado su crecimiento. Las áreas más afectadas se encuentran al norte y oeste del área agrícola, con 50.000 hectáreas en malas condiciones y cerca de 200.000 en estado regular. Se necesitan al menos 15 a 20 mm para mejorar las expectativas de rendimiento.
A pesar de esto, las condiciones en los núcleos sur y norte son mayormente normales o excelentes en más del 80 % del área, dependiendo de las lluvias esperadas en los próximos días.
Situación de la cebada y el girasol
La siembra de girasol ha avanzado solo un 0,4 % esta semana, alcanzando el 8,7 % de las 1,85 millones de hectáreas proyectadas. Esto representa una demora de 12,6 puntos porcentuales respecto al promedio histórico. El cumplimiento de la proyección de siembra depende del pronóstico de lluvias en los próximos días.
En cuanto a la cebada, de las 1,3 millones de hectáreas sembradas, el 76 % presenta una condición hídrica adecuada u óptima, aunque esto representa una caída de 7 puntos porcentuales respecto a la última evaluación. El 85 % de la cosecha está en condiciones normales o buenas, gracias a las favorables condiciones en las zonas cebaderas del sur.