Dicha particularidad genética se llama leucismo cromático y se considera un fenómeno «relativamente poco frecuente»
Pese a lo impresionante del color, a las tortugas doradas les cuesta «ocultarse en el entorno oscuro, verdoso y acuoso». Asimismo, los ejemplares tan insólitos a menudo son «salvados» y capturados o trasladados a nuevas áreas.
La definieron como una “rebanada de queso, un trozo de mantequilla o la yema de un huevo”. Fue hallada también al Este del país y rápidamente se viralizó en las redes.

Según los científicos, se trata de una mutación cromática que es raro que se de en la naturaleza, pero al parecer, este extraño fenómeno es más común de lo que se esperaba.
Las variantes amarillas de la tortuga de caparazón indio (Lissemys punctata), una especie de agua dulce que habita al sur de Asia. , son generalmente de color marrón con manchas amarillas y una parte inferior de color blanco cremoso, pero no totalmente amarillas como estos dos ejemplares encontrados recientemente.
En 1997, se descubrió una tortuga con un cuerpo amarillo y ojos rosados en Gujarat, en la costa occidental de la India, y se dice que se han encontrado otros ejemplos similares en Myanmar y Bangladesh, aunque los datos no están publicados.
La primera tortuga dorada capturada en Odisha desató una ola de supuestos hallazgos similares, aunque tampoco fueron debidamente registrados.

La razón de su color, según los investigadores, se debe a la falta de pigmentación corporal, algo parecido en términos al albinismo puro, un trastorno genético que causa una falta total de pigmentos en el cuerpo, pero en lugar de aparecer completamente blancos, en ocasiones los pigmentos de pteridina amarillos pueden sobrevivir para dominar la producción de color (junto con los pigmentos oculares).

Es lo que se llama leucismo cromático y, entre las tortugas, los investigadores dicen que puede producir las variantes de color más “deslumbrantes”, aunque los casos son “poco comunes”.
Cuando los herpetólogos en India encontraron la primera tortuga “amarilla” el pasado mes de junio explicaron que en algunos casos, si un pigmento diferente logra pasar, la especie puede incluso aparecer roja. Dicho esto, es muy difícil encontrar ejemplos de estas tortugas.
Los animales albinos son muy apetecidos, además, por los traficantes de especies ya que al ser ejemplares de colores extraños y llamativos como el de esta tortuga, los pueden vender por miles de dólares.
Las tortugas están bajo protección. Más de la mitad de las 360 especies de tortugas terrestres y continentales estaría en peligro de extinción. Dentro de las principales amenazas están el tráfico ilegal de animales, ya sea para comercio, turismo, mascotas, medicina o comida para los humanos. Además del cambio climático y la destrucción de su hábitat.

Vía: Ecoportal