El hallazgo de una estrella muy joven generó sorpresa entre los científicos que pensaron era imposible la presencia de un cuerpo celeste en ese lugar. Es que se encuentra cerca del agujero negro supermasivo Sagitario A estrella (Sgr A*) en el centro de nuestra Vía Láctea.
Fue calificada de «estrella bebé» porque pese a que tiene varias decenas de miles de años de edad, es de las más jóvenes en su tipo, más reciente incluso que la humanidad, y fue denominada X3a.
Una de las curiosidades es que no debería poder existir tan cerca del agujero negro supermasivo. Pese a eso, según un estudio publicado en The Astrophysical Journal, X3a se formó en una nube de polvo que orbita alrededor del agujero negro gigante y se hundió hasta su órbita actual sólo después de haberse formado.
«Resulta que hay una región a una distancia de unos pocos años luz del agujero negro que cumple las condiciones para la formación de estrellas. Esta región, un anillo de gas y polvo, es suficientemente fría y está protegida contra la radiación destructiva», explicaron los especialistas.
Una de las hipótesis apunta a que en el anillo exterior de gas y polvo que rodea el centro de la galaxia, protegida de la radiación y la influencia gravitatoria de Sgr A*, pudo haberse formado una nube suficientemente densa, que creció y colapsó bajo su propia gravedad hasta formar una o más protoestrellas.