El compilado de fotos a continuación, se tomaron desde Texas a Dakota del Norte. Las supercelda o supercélula son tormentas increíblemente raras, y sus avistamientos muchos menores que los de sus variantes unicelulares o multicelulares. debido a sus propiedades únicas, son sumamente peligrosas.
Las tormentas severas pueden poner en peligro la vida, pero no todas las tormentas severas son iguales. Las condiciones peligrosas van desde tornados, grandes tormentas de granizo y vientos extendidos en línea recta llamados derechos, hasta rayos de nube a tierra e inundaciones repentinas.
Para que una “tormenta fuerte” logre ascender de categoría convirtiéndose en “tormenta severa”, no es necesario que se concreten conjuntamente todos los fenómenos anteriormente enumerados. Por ejemplo, no todas las tormentas severas poseen las condiciones atmosféricas suficientes para el desarrollo de tornados, sin embargo, las violentas ráfagas que descienden del sistema nuboso, (sin necesidad de la formación de una columna de aire rotante que toque tierra), pueden generar escenarios de destrucción total, ratificando el concepto de “severidad”.
Para la formación de una tormenta severa, es necesario que se desarrollen nubes de gran porte e importante desarrollo vertical. Para esto es indispensable que la atmósfera contenga suficiente energía, o sea que, la masa de aire debe ser cálida y a su vez contener elevadas cantidades de vapor de agua distribuidas en toda la capa vertical. Además de estas condiciones se necesita de un “mecanismo disparador” (por ejemplo, el avance de un frente frío), para que el sistema crezca. A su vez no deben presentarse factores que inhiban o restrinjan el desarrollo de la nube hasta su madurez, (como por ejemplo inversiones térmicas en niveles medios de la atmósfera).
Una tormenta supercelda es similar a una unicelular, pues ambas tienen una corriente ascendente principal. Sin embargo, a diferencia de la última, la supercelda es muy fuerte: sus vientos alcanzan velocidades entre 240 y 280 km/h. Es tan intensa que fácilmente puede voltear coches, arrancar árboles e incluso destruir edificios enteros.
La diferencia principal entre una tormenta supercelda y otros tipos de tormenta es la presencia de energía rotacional que provoca que la corriente ascendente gire (a esto se le llama mesociclón) y ayuda a generar un clima extremo en sus inmediaciones: lluvias inmensas, granizos de 5 cm de espesor y violentos tornados.
Vía: dingox
Fotografía: Chad Cowan
Con Información de: https://www.meteored.com.ar/