Los árboles Ginkgo son un verdadero fósil viviente. Han aguantado todo tipo de cambios climáticos desde hace más de 200 millones de años.
El Ginkgo biloba crece principalmente en China y Corea, y en mucha menor medida en Estados Unidos, el sur de Francia, en algunas ciudades de España, y en puntos determinados de Uruguay, Chile y la Argentina.
Se lo encuentra en varias provincias, y en la Capital Federal hay ejemplares en el antiguo zoo, el Botánico, el barrio Parque, en la Plaza Belgrano del Barrio de Belgrano y en el Jardín Japonés.
Y es inmortal. Su origen se remonta a 200.000.000 años atrás y era alimento de los dinosaurios. Los científicos creyeron, en un momento, que había desaparecido, pero un médico alemán, Engelbert Kaempfer, lo encontró en 1691 en Japón.
Este es un precioso árbol en concreto tiene 1400 años de edad, y aunque no es el árbol más anciano de nuestro planeta, si que lo es la especie a la que pertenece.
Se trata de un árbol Ginkgo, también conocido cómo el árbol de los 40 escudos y aunque no lo parezca es un verdadero fósil viviente, ya que esta especie permanece en nuestro mundo desde hace más de 200 millones de años, superando multitud de cambios climáticos y sobreviviendo desde la época de los dinosaurios hasta hoy día. Sin duda un largo viaje.
Este árbol se encuentra en el templo budista Gu Guanyin, en las montañas Zhongnan, en China. Miles de personas de todo el país se han acercado estos últimos días a ver el magnífico espectáculo que representa ver cómo se quita el abrigo este árbol, soltando sus hojas amarillas, inundado el suelo del templo y creando un precioso efecto de océano amarillo. Este es el templo budista Gu Guanyin, en las montañas Zhongnan, en China.
Vía: qcosas.com